Resulta que estoy con Peggy en la agencia de publicidad. Ella tiene un vestido bordó, que la hace un poco gorda. Mi vestido es gris, y el peinado alto. Estamos acomodadas en los sillones, dando vueltas algunas impresiones de avisos, y mordisqueando galletitas "club social". Con eso que tienen esas galletitas, esa sal por encima nos da sed. Hace calor, es verano en NY.
Y entonces, yo digo "cómo me gustaría tomarme un vermouth!" Y Peggy dice "y, si este trabajo no permite que una dama se pague un vermouth de vez en cuando, no vale la pena". Así que nos levantamos y nos acercamos al bar. Mejor dicho, a la barra, porque en el hall de las oficinas había una barra, y nos acomodamos en las banquetas altas, fijas al suelo. Y pedimos los tragos, que nos sirvieron enseguida. Un líquido naranja rojizo en vasos cortos y toscos, de vidrio. Hielo que no flota, sino que se acomoda en el fondo, y una ramita de canela.
2 comentarios:
Vos y tus sueños cosmopolitan xD Che... la anecdota del piropo no?
que piropo??
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