jueves, 24 de junio de 2010

Es oficial

Un recuerdo de cuando la vida era una mierda, llena tu buena vida de mierda.
NOOOOOOHAGGGGAAAAAAANOOOOOOOOOLAAAAAAAAASSSSSSSSSS

miércoles, 23 de junio de 2010

Neurosis

Pensar que quizas el piense que esa imagen es mejor mantenerla porque quien va a pensar que por esa imagen va a ser él entonces mejor seguir usando la misma porque de ultima mucha gente usa esa imagen. Entonces cuando me aparece en el fbk esa imagen y de ahi que pienso en L. y me pregunto ¿será L.? y como que me da cosa y pienso que piensa que mejor esa imagen, que total mucha gente la tiene pero es él con la imagen de siempre.
Entonces, si, después me doy cuenta que, efectivamente, mucha gente tiene esa imagen en el fbk...

martes, 15 de junio de 2010

Desarrollo Constructivo

Cuando puede, por fin, empezar a escribir este proyecto, fue porque tomé papel y lápiz y lo puse, trabajosamente, grafito sobre papel, palabra a palabra, borrando, redactando y pensando lento, al ritmo de la escritura a mano.
Luego, mis notas a lápiz fueron tranformándose en citas, de citas a listas de conceptos con sus autores, de ahí pasé a agrupar a los conceptos y a sus autores.
Y ya el word, que no estaba en blanco, no me intimida y con apenas media carilla escrita, una idea y un comentario al costado, puedo teclear tranquilamente mi trabajo, sin sentirme impedida por el medio, ni por mi cabeza.
Esta buenisimo eso, porque muestra que cuando yo tenía que aprender una nueva capacidad (escribir proyecto de investigación) y no sabía como, me fui autoandamiando con distintos elementos (papel y lapiz) que me ayudaron a autorregular la actividad y terminé siendo autónoma (o casi) de esos elementos, autorregulandome solita en mi cabeza (a veces en voz alta).
Me pone muy feliz decirles, amigos, que en dos días mas mi proyecto va a estar terminado.

domingo, 6 de junio de 2010

Mala època para ser abuel@ (segunda parte)

Entonces, ayer se murió mi abuelo Cholo.
Parece que llevaba como veinte días en coma farmacológico (que es tan fashion ultimamente), y pensaron que era tiempo de sacarlo de ahí y ponerlo a respirar solito como Dios manda, que después de todo ya podía... y no lo pasó, le dio un paro. Y se murió.
Y a mí no me duele la muerte de mi abuelo. Me duele por mi padre, eso sí. Lamento profundamente todo el dolor que debe sentir mi viejo, y todo el lío familiar que debe afrontar. Lamento que le pase enterarse de lejos, que deba salir corriendo al aeropuerto, rogar por un pasaje. Lamento que llegue allá y tenga que vivir en lo de mi abuelo, esa casa donde supe vivir mal, y donde se vive mal. Lamento la mala relación con los hermanos. Lamento sus ganas de estar, pese a todo.
Y lamento profundamente lo que va a ser la parte mas dolorosa... la parte que venga el resto de este año, cuando repartirse una casa destrozada sea ya lo último que comparte con sus hermanos.
Yo perdí a mi abuelo hace varios años ya. Lo perdí una vez que con mi Ex L. fui a buscar el resto de mis cosas que quedaban ahí. Una huida de un pequeño infierno al que ya no pertenecía, pero que me había golpeado duro antes de irme definitivamente.
Perdí abuelos y tíos, paulatinamente, en unos mas o menos cinco o seis meses perdí. A la Heidi de mi tía bastante rápido... a mis otro tíos mas lentos. Me quedó otra rama de la familia, y finalmente pensé que mi abuelo ya estaba muerto porque ese que estaba ahí no era mi abuelo, ese estaba loco, tenía algún problema, no era con quién viví dos años, tomando mate las terdecitas de sábado con el pan recién tostado, la manteca derretida por el calor del pan. No era el abuelo que me pellizcaba con los dedos de los pies las piernitas o con los dedos de las manos los cachetes (me pellizcaba fuertísimo! era horrible ir a lo de mi abuelo Cholo). No era el abuelo que cuando murió la abuela Chela puso esa foto de ella donde parece una actriz de cine sobre la mesa de luz. El abuelo que puso una perilla de cerámica, con una rosa pintada, en las puertas de mi placard. El que armó mi bicicleta (porque ese, el que no era mi abuelo, le puso unos soportes y la hizo fija), el que armó mi velador con un copón antiguo.
Mi abuelo se murió años antes de morirse. Mi nono.
Ahora ando desabuelada en serio, la vida no cambia un ápice. Quizás mis padres estén mas tristes, eso sí. Quizás yo este un poco mas triste, también. Pero fuera de eso, no puedo percibir, en mi apelación absurda a la objetividad, que nada haya cambiado por acá, en el sur.

Mala època para ser abuel@

Hace cosa de un mes y pico mi abuela Blanca se murió. Y digo así: se murió. No me gustan las palabras "falleció" ni "feneció" y menos que menos esas absurdidades de "pasó al otro lado" o "se fue de gira". No me gustan, porque suavizan. Y no creo que nadie tenga derecho a suavizar ni una pizca el dolor tan definitivo de que alguien querido se muera.
Así que cuando se murió mi abuela, que es cierto, no andaba nada bien, y era esperable una muerte como esta en cualquier momento, me enteré de que se murió y me puse muy triste.
Agravado quizás por no poder estar con mi familia, me pasé un par de días en plan bajón: tirada en la cama, viendo tele, pensando en nada y si pensaba... recordaba la infancia. Mi abuela Blanca me crió durante mi infancia, bastante. "La luz de mis ojos", "mi nietita favorita" (era la única nietA, así que era fácil) yo me crié amparada bajo su vozarrón y su energía, patinando con sus patines de felpa en el parquet encerado, jugando con la loza fina.
La casa de mi abuela muchas veces fue un gran misterio, un lugar donde buscar puertas secretas, donde volar. La cama de mi abuela era mi reino, siempre tendida, impoluta, con su colcha celeste matelaseada, sobre la cual yo podìa jugar con la muñeca fina que había sido de mi madre.
La vereda con la entrada de mármol negro, siempre oliendo a pis de gato y lavandina. Mi abuela me veía subir por las veredas rotas con mi triciclo. Odiaba a los gatos, que le meaban la entrada, que le contagiaron sarna de niña.
Y yo amo a mi abuela. La aprendí a amar, a conocer sus facetas oscuras, de esas que no se muestran a sus nietos, de esos que cuentan las madres. Su juventud de arrabalera, su matrimonio quizás algo triste y después... su olvido continuado, su preguntar diezmilveces lo mismo, su insistir en preguntar por otras personas, el olvidar a su nieta y reemplazarla por el rostro juvenil de una amiga...
y finalmente, ya no me recordaba ni a mi ni a nadie... y deje de ir a verla... y pasaron años quizás... y se murió, finalmente era una vieja jodida, las viejas jodidas tardan en eso de morirse... te juro que cuando sea (muy) grande, voy a ser una vieja jodida.

viernes, 4 de junio de 2010

Pesares

Desde esta semana que no puedo pasar por alto nada de lo que diga o haga C. Mientras que la paciencia es virtud, y la tolerancia es la base de esta pareja, donde ambos debemos tolerar(nos). Yo llego al pico de mi intolerancia, mi irascibilidad.
Cuando el enojo no hace mas que sacarme lágrimas de impotencia, porque no hay grito válido, insulto explícito, gesto o manotazo de ahogado que se justifique mientras pregunto, pido, ruego "explicame".
Y te vas.
Y no te explicás.
Y después de la otra noche, que por mi podría haber sido anteayer de como duele... no podes.
No entiendo qué cuesta una explicación. Algo mas de "tengo cosas que hacer".
Algo similar a " tengo que hacer.... y vuelvo a las .... hs" a mi me satisface ¿Por qué cuesta tanto esa simpleza?

Para que sepan: C. me trató muy mal hace unas noches. Muy mal. Dijo cosas de esas que NUNCA hay que decir. Yo se qué el no piensa las cosas que dijo, que estaba alterado, que cuando se altera no se controla.
Pero te aseguro, amigo, que no tenía ninguna razón para alterarse. No le dí ni media razón... a menos que apoyes la subordinación incondicional de la mujer a su pareja, que estoy segura que no estas de acuerdo. Sin embargó, C. se enojó. C. me trató muy mal... y después de tratarme mal me trató PEOR.
Y si, estoy muy muy muy muy enojada. Me gustaría que se me pase.
Pero no.
No se me pasa.
no se que mierda hacer... y este pibe no se da cuenta que está en capilla y encima se desacata.

miércoles, 2 de junio de 2010

Es oficial

Mes nuevo, placard ordenado.
Ahora, vamos por la biblioteca!
Junio, mes de la vida en el hogar.