martes, 25 de septiembre de 2012

Es oficial

Odio tomar examen final. Es aburridisimo.
Y el césped, en la plaza, se ve tan verde desde la ventana del aula!


Mimo

De repente, cuando estiro la pierna,  mi pié queda entre los pies de él, y me aprieta el piecito entre los suyos. Yo, feliz.
Los dos seguimos estudiando, como si la magia no existiese.


sábado, 15 de septiembre de 2012

Blog

La continuidad de este blog está en duda.
Bueno, en realidad, siempre está en duda, esta suerte de bitácora personal y onírica. Pero, es justamente en la parte onírica que creo que falla.
El tema es que escribo porque quiero. Porque se me canta. Y porque me gusta, sobre todo, contar cosas. Y algo lindo de contar son los sueños. Porque son locos, a veces muy transparentes, a veces demasiado surrealistas, a veces son aterrorizantes, a veces me dejan en las nubes. A veces son eróticos!
Pero lo cierto es que, es mas bien por la necesidad de trasladarlos a relato, a texto. Por las ganas de que tomen tangencia en mi día, poder pensarlos. Para pensar hay que nombrar.
El tema es que el blog cumplía esa función, con relativa eficiencia, y me dejaba relativamente satisfecha. Donde nunca me gustó el tema del blog, es donde resulta que desde que sueño hasta que lo escribo, pasa mucho tiempo: levantarme, vestirme, prender la compu... Salir completamente de la duermevela y ponerse a escribir, nunca me cerró. Los sueños quedan más elaborados, menos vírgenes, aunque tengo mejores adjetivos que ni bien me levanto.

La verdad es que ahora, escribir los sueños, pierde sentido. O sea, vos que me lees siempre, sé que te matarías de risa si te dijera que soñé con una película, yanqui, que hablaba de la influencia que tuvo la llegada del Che y de Fidel Castro a Maiami en una familia de ese lugar. Una película donde la protagonista se enamoraba del Ché (Jonny Deep) y dejaba a su marido. Donde Fidel Castro estaba rubio, interpretado por Brad Pit. Y la historia era terrible. Bueno, eso soñé anoche. Hay mas, pero no me dan ganas de contarlo porque ya le conté todo a mi chico cerámica.

Ese es el tema: Me levanto, y mientras me visto, mientras preparo el desayuno, mientras él se viste, mientras salimos del sueño, lo vamos relatando. Entonces, cada mañana, cuando abro los ojos al lado de mi chico cerámica, el sueño va siendo a medida que se lo cuento a él. Y es mas limpio así. Es mas lindo, también.

Por eso, no se si voy a seguir escribiendo en este blog porque, la idea, es siempre, siempre, poder contarle mis sueños cada mañana.

lunes, 3 de septiembre de 2012

Bajada forzada

Una no quiere bajar. Unos no queremos.
Pero resulta que cuando la billetera tiene razón, tiene razón.
Me cuesta horrores manejar mi ansiedad. Pienso todo el tiempo en los planes con mi chico cerámica. Pero, hay que juntar los renos, diría una vieja amiga de mi madre. Hay que juntar los renos, traerlos a la casa y entonces, si.
Navidad es una buena época.

(mentira, los planes llegan antes de Navidad. Mucho antes, espero. Pero no mañana)

Con chico cerámica nos agarramos un embale que justamente, nos poníamos a embalar todo YA. Pero, no. Razón, razón. Malvada razón. Nos moderamos, descubriendo, que habíamos sido mas racionales antes, cuando el loco plan surgió, que ahora, que tomamos la decisión de hacerlo...

No importa, en realidad. Seguimos con nuestro amor, casi nuevo, disfrutando la vida, juntando los renos, soñando, soñando, soñando... Y aunque me muera de ganas, de ansiosa, hay que esperar un poco mas. Un poquito mas de racionalidad. Unos meses, nomas.

Sigo feliz.

viernes, 31 de agosto de 2012

Que noche la de anoche!

Siento flojo un diente, abajo. No estoy segura si es el premolar o el colmillo. Debe ser el colmillo, porque es puntudo. Tiro, abajo, en la raíz, está suelto. Es mas la presión de los diente alrededor lo que lo mantiene en su sitio, apenas. Si lo empujo un poco con la lengua y tiro hacia arriba del diente, lo saco.
Le digo a Andi, que duerme al lado mío, si conoce un buen dentista. No conoce.
Me preocupo, porque no es normal que los dientes se salgan, de golpe. No los definitivos, al menos.
Pero, se solucionó todo en cuanto desperté.

miércoles, 22 de agosto de 2012

Mas claro, ahogate!

La verdad, desconfío de esa gente que dice "yo nunca recuerdo mis sueños". Creo que mienten. O que tienen vidas muy muy tristes. O que son reprimidas.
Los sueños, a mi, me agotan a veces, me aterrorizan otras, o me dejan feliz. Pero no son olvidables. Para nada.
Quienes nunca recuerdan un sueño vivido, se pierden un cacho importante, importantísimo, de la discusión filosófica sobre la realidad. Quienes tienen sueños pálidos, olvidables, nunca se ven en el brete de pensar "¿acaso anoche...?"
No es fácil, creo que los sueños se aprenden a recordar. Poniéndole empeño, y haciendo una tarea de reconstrucción del recuerdo. Es armar, a partir de esas sensaciones, imágenes, impresiones sueltas, el recuerdo. Un cuento, una narración: darles sentido.
Yo no sé si mis sueños son como los cuento.
No me importa.
En principio, nadie sabe cómo son los sueños... Pero no soy la primera que narra sueños. Hay miles de personas ahí, soñando, y haciendo lo que puede con sus sueños. Y todos narramos. Cosa básica para el Homo sapiens, narrar. Poner en el tiempo. Representar.
Yo creo que mis sueños narrados son la mejor representación de mis sueños, de esos que según la psicología, son manifestación de mi inconsciente. Y si no te gusta mi modelo de sueño, armate  otro. A mi este, me ajusta razonablemente con lo que me pasa.

Este sueño que sigue, que fue, claro, anterior a mi reflexión, muestra, claro como el agua, en qué anda mi cabeza ultimamente. Soñar con dos amigas, que estaban en parejas consolidadas y que ahora no están. Pensarlas de nuevo con esas parejas, haciendo cosas que cualquiera haría... Mi inconsciente está bien consiente hoy por hoy. Y me muestra, claro como el agua, los miedos.

y que sería de esta vida sin un poco de miedo? Todos estaríamos aplastados contra el suelo, de tanto jugar a ser superman.



Siesta

Estoy con Vaal y Maxi. Por alguna razón, juntos de nuevo. Él está sentado en la computadora de escritorio, y ella está hechada en una inmensa inmensa cama de dos plazas, con una note enfrente. Yo estoy sentada en la cama, mas bien sobre un borde, y escucho a vaal decir cosas que no me interesan sobre gatos. Raro que no me interese, pero tengo una sola cosa en la cabeza, ultimamente. Y no es mi tesis. Por eso la interrumpo, le digo "te quiero contar algo". Y resulta que, esta vez, no es Vaal quien interrumpe mi discurso, sino que es maxi, que se sube a la cama y empieza a actuar como un gatito juguetón. Vaal se prende al juego y se ponen a retozar sobre el colchón enorme, como dos gatitos.
Entonces, cambia la escena, está mi amiga ranita y su ex, pero en esa escena siguen juntos. Y ellos me hablan de las ventajas de las papas noisette congeladas, lo ricas que quedan hechas puré, con un poco de hierbas o queso fresco (a mi me parece horrible). Él nota mi escepticismo y se esfuerza en describirme la textura de las noissetes rotas, la parte untuosa del puré, la parte crocante de la cubierta, todo desarmado. Sigo creyendo que es horrible, incluso despierta.