Con Dire entramos a esa tienda de ropa, que olia a feria americana, pero no. La ropa se organizaba cogada de percheros largos, con una fila arriba y otra abajo, armaba pasillos medio laberinticos.
En un momento, decidimos probarnos nuestros hallazgos. Los probadores eran de madera, carcomida como si fuese madera de playa. Y por entre los aujeros veiamos el vestuario de los hombres... Entonces Dire se estira toda, media en bolas, para chusmear que habia del otro lado
Blog onírico cotidiano, sobre el onírico cotidiano, desde la Patagonia ya sin ceniza.
martes, 22 de marzo de 2011
lunes, 21 de marzo de 2011
sueño sucio
Could you put a name to someone else's sigh?
Could you put a face to someone else's eyes?
Is it someone that you'd maybe recognise?
But it all fades into morning when you open your eyes
Etiquetas:
Libido,
No soy escritora,
ser mujer,
sueños
GRACIAS
justo en este momento, luego de tener websex con Gran Poder (mediocre, por cierto... pero yo estoy falta de practica con eso... y el websex es mediocre de por si.), leí justo justo lo que necesitaba en La Clarin. Y como a mi no se me ha perdido nada, en ningún lado, "quiero tener un coro de pajaritos", y que el amor se vaya a secuestrar a otro. (Por ejemplo, a Conz)
sábado, 19 de marzo de 2011
Nos engañaron con la primavera (pero de otra forma)
Hay momentos de mierda, como siempre.
Como odiar esta casa tan linda, porque en parte se moja toda, y pone loca a mi directora.
O sentirme sola a pesar de no estar nunca sola. Pero no poder expresarme con toda la libertad que necesito.
O no sentirme sola, y querer un rato para mi, para no hacer nada, o hacer cualquier cosa.
Que se yo. No es fácil esta convivencia... pero resta una semana mas.
En fin.
Hoy toco dia depre, y eso que el rio ya se descongelo.
Como odiar esta casa tan linda, porque en parte se moja toda, y pone loca a mi directora.
O sentirme sola a pesar de no estar nunca sola. Pero no poder expresarme con toda la libertad que necesito.
O no sentirme sola, y querer un rato para mi, para no hacer nada, o hacer cualquier cosa.
Que se yo. No es fácil esta convivencia... pero resta una semana mas.
En fin.
Hoy toco dia depre, y eso que el rio ya se descongelo.
sábado, 12 de marzo de 2011
Que noche la de anoche (Montreal - 02)
Entonces mis viejos me dicen "¿Y cuando lo vas a presentar?" Les pregunto de que hablan, y me dicen... que tendría que presentar a mi amigo, que después de todo durmió conmigo, en mi cuarto, y que que hice anoche.
Entonces ellos se dieron cuenta, carajo, de que metí a Gran Poder en mi pieza, no creo que mi hermana me haya delatado, aunque a la mañana, cuando me levanté, como a las 6:30 ella estaba en la cocina (en la Villa, claro, donde vivíamos) preparándose el desayuno, antes de irse a estudiar. Porque cuando mi hermana me vio, todavía en pijama, me dijo que los viejos dormían, que habían llegado tarde... Y ahí aproveché para abrirle la puerta a Gran Poder, y se fue, luego de una noche poderosa, sin duda... Pero ahí esta mi madre, preguntándome que hice anoche...
Y es que anoche fue Viernes, pero en lugar de salir de milonga, hice algo diferente. Salí con una amiga, porque había fiesta de disfraces. Una cagada: las dos nos disfrazamos de super chica, con una remera roja, un short negro y el pelo planchado, teñido de oscuro (no me pregunten... pero en el sueño, estábamos perfectas con ese disfraz). Entonces fuimos hasta ese lugar en San Telmo, donde era la fiesta. En realidad, pasamos gratis por estar disfrazadas, la fiesta era escalaras arriba (y ahora que pienso, otra vez subir escaleras mientras duermo...). Y con mi amiga pasamos a la fiesta, pero entonces hay otra puerta, donde hay una reunión política feminista. Y ahí, en el palier, me la encuentro a CFK (Sisi, Cristina nuestra presidenta) que entra conmigo a la reunión, en el recibidor hay un montón de papeles pegados contra las paredes, y entre ellos uno que tiene una crítica muy divertida a su gobierno... le señalo a CFK lo que dice, con cara de preocupación... quizás no sea bienvenida allí. Pero se encoge de hombros y medio sonríe, porque la verdad es gracioso el cartel... Después de todo, a ella le preocupa Clarín, no un grupo de estudiantes que tratan de votar diferentes partidos que proponen preocuparse por diferentes cosas (por la música, o por las plazas, o por el tejido...)
en fin, el tema es que me voy de ahí, para encontrarme con Gran Poder, y entonces pasamos por el cementerio de los monos.
Un horror: porque los monos viven en el cementerio, porque la falta de calcio los lleva a desenterrar los huesos y roerlos. Pero de paso empezaron a vivir entre las tumbas, y generaron una sociedad territorial y estratificada, tanto, que la gente no puede entrar al cementerio sin que los monos te ataquen. Odio los monos, sisi, encima son grandes estos. Y ahora, cuando las chicas negras van al colegio (de guardapolvo blanco), y como el colegio queda al lado del cementerio, hay unos guardianes, con palos, que cuidan que los monos no pasen la reja del cementerio y ataquen a las chicas. Un horror, en fin, pero por ahí pasé con Gran Poder, y de ahí derecho a la casa en la villa, que mis viejos y mi hermana duermen...
Y ya saben como termina la historia, mi madre que me pregunta que hice anoche, mi padre pidiendo explicaciones y que presente a Gran Poder a la familia... Y por suerte me despierto, antes de tener que contarles todo esto.
Entonces ellos se dieron cuenta, carajo, de que metí a Gran Poder en mi pieza, no creo que mi hermana me haya delatado, aunque a la mañana, cuando me levanté, como a las 6:30 ella estaba en la cocina (en la Villa, claro, donde vivíamos) preparándose el desayuno, antes de irse a estudiar. Porque cuando mi hermana me vio, todavía en pijama, me dijo que los viejos dormían, que habían llegado tarde... Y ahí aproveché para abrirle la puerta a Gran Poder, y se fue, luego de una noche poderosa, sin duda... Pero ahí esta mi madre, preguntándome que hice anoche...
Y es que anoche fue Viernes, pero en lugar de salir de milonga, hice algo diferente. Salí con una amiga, porque había fiesta de disfraces. Una cagada: las dos nos disfrazamos de super chica, con una remera roja, un short negro y el pelo planchado, teñido de oscuro (no me pregunten... pero en el sueño, estábamos perfectas con ese disfraz). Entonces fuimos hasta ese lugar en San Telmo, donde era la fiesta. En realidad, pasamos gratis por estar disfrazadas, la fiesta era escalaras arriba (y ahora que pienso, otra vez subir escaleras mientras duermo...). Y con mi amiga pasamos a la fiesta, pero entonces hay otra puerta, donde hay una reunión política feminista. Y ahí, en el palier, me la encuentro a CFK (Sisi, Cristina nuestra presidenta) que entra conmigo a la reunión, en el recibidor hay un montón de papeles pegados contra las paredes, y entre ellos uno que tiene una crítica muy divertida a su gobierno... le señalo a CFK lo que dice, con cara de preocupación... quizás no sea bienvenida allí. Pero se encoge de hombros y medio sonríe, porque la verdad es gracioso el cartel... Después de todo, a ella le preocupa Clarín, no un grupo de estudiantes que tratan de votar diferentes partidos que proponen preocuparse por diferentes cosas (por la música, o por las plazas, o por el tejido...)
en fin, el tema es que me voy de ahí, para encontrarme con Gran Poder, y entonces pasamos por el cementerio de los monos.
Un horror: porque los monos viven en el cementerio, porque la falta de calcio los lleva a desenterrar los huesos y roerlos. Pero de paso empezaron a vivir entre las tumbas, y generaron una sociedad territorial y estratificada, tanto, que la gente no puede entrar al cementerio sin que los monos te ataquen. Odio los monos, sisi, encima son grandes estos. Y ahora, cuando las chicas negras van al colegio (de guardapolvo blanco), y como el colegio queda al lado del cementerio, hay unos guardianes, con palos, que cuidan que los monos no pasen la reja del cementerio y ataquen a las chicas. Un horror, en fin, pero por ahí pasé con Gran Poder, y de ahí derecho a la casa en la villa, que mis viejos y mi hermana duermen...
Y ya saben como termina la historia, mi madre que me pregunta que hice anoche, mi padre pidiendo explicaciones y que presente a Gran Poder a la familia... Y por suerte me despierto, antes de tener que contarles todo esto.
martes, 8 de marzo de 2011
Que noche la de anoche (aux Montreal - 01)
Después de un recital, conozco a René Perez. Vamos a una fiesta. Las escaleras para llegar a la casa estan llenas de nieve, pero él no parece tener frío, pese a que viste pantalon de microfibra y musculosa. En la casa, subismos hasta un cuerto donde tenemos sexo. A pesar del frío él es cálido (y aparte, como es el Residente, esta buenisimo).
A la mañana siguiente me ofrece el desayuno... se va aclarando que fue cosa de una noche.
Cosas que pasan, aunque me gustaría volver a soñarte, René
A la mañana siguiente me ofrece el desayuno... se va aclarando que fue cosa de una noche.
Cosas que pasan, aunque me gustaría volver a soñarte, René
miércoles, 2 de marzo de 2011
Como siempre, diferente
Y es que nunca pasa que se siente igual. Pero a veces es tan familiar, a la vez diferente. Será que estaba tan cómoda, que fue todo tan fácil, tan lindo.
Me siento apenas mal. Es una leve angustia. Un pequeño temor de que haya sido principio y fin. Pero al fin de cuentas tengo que aceptar que siempre es principio y fin, y quizás la posibilidad siga allí después del final. Pero esta vez no importa, y esta vez me siento apenas mal, mas que nada, sensacion de apego mal dirigida. No es la primera vez que pasa.
Mi madre dijo cuando yo estaba de novia con C. que seguro que si me iba a Canadá, cuando volvía me iba a vivir con él. Que la distancia, que el extrañarse, traerían eso. Ella sabrá, después de todo mi padre le pidió casamiento mientras ella estaba de viaje...
Pero ahora no estoy de novia, ni cerca. Y todo lo que tengo es un caso de apego mal elaborado, mal dirigido, a un pobre hombre que poco y nada tiene que ver con el asunto, a menos que pensemos que tiene muchisimo que ver el hecho de que anoche durmió en esta cama, desde la que escribo. Pero eso es circunstancial, que ya sabemos que puede ser ese o casi cualquier otro, que cuando la libido anda suelta, me vuelvo una dicharachera, y duermo poco.
Pero es que anoche fue facil, fue lindo. fue igual y distinto.
Y te explico, porque no es tan fácil. Que estábamos los dos charlando de la vida, tomando hesperidina felices en el balcón, con la fresca. Y terminamos de tomar el trago, y cenamos, y charlamos con un decoro que dan ganas de salir afuera, a mostrarnos como amigos, con lo bien que sale. Y al final, de postre total, que después de tirarle un palo (que mas que palo era un escarbadientes, super inocente lo mío) y el que me respondiera con un piropo. Y después otro, Y otro mas, y a los besos derecho viejo. Unos besos de lo mas interesantes.
Y que me agarre el pelo, sin problemas, para encontrarse con que a mi me encanta.
Y que encajemos tan tan bien.
Un chico alto.
Muy alto, de larguisimas piernas, cintura estrecha. Un tatuaje, un par de piercings, y un plan.
Y sin ganas de atarse a nada.
Un hombre divertido, avezado en menesteres de cama. Un hombre que pregunta sin juzgar y que juega sin mirar las reglas... y sin cometer infracciones!
me sentí lo suficientemente cómoda como para preguntarme si sera posible, quizás, verlo de nuevo. Sabiendo.
Sabiendo que no es de esos hombres que se atan.
Y jugandomela a cambiar de entrada, a full, con todo. Porque te voy a contar un secreto:
Siempre se pelea con el padre, porque no le deja el auto.
Me siento apenas mal. Es una leve angustia. Un pequeño temor de que haya sido principio y fin. Pero al fin de cuentas tengo que aceptar que siempre es principio y fin, y quizás la posibilidad siga allí después del final. Pero esta vez no importa, y esta vez me siento apenas mal, mas que nada, sensacion de apego mal dirigida. No es la primera vez que pasa.
Mi madre dijo cuando yo estaba de novia con C. que seguro que si me iba a Canadá, cuando volvía me iba a vivir con él. Que la distancia, que el extrañarse, traerían eso. Ella sabrá, después de todo mi padre le pidió casamiento mientras ella estaba de viaje...
Pero ahora no estoy de novia, ni cerca. Y todo lo que tengo es un caso de apego mal elaborado, mal dirigido, a un pobre hombre que poco y nada tiene que ver con el asunto, a menos que pensemos que tiene muchisimo que ver el hecho de que anoche durmió en esta cama, desde la que escribo. Pero eso es circunstancial, que ya sabemos que puede ser ese o casi cualquier otro, que cuando la libido anda suelta, me vuelvo una dicharachera, y duermo poco.
Pero es que anoche fue facil, fue lindo. fue igual y distinto.
Y te explico, porque no es tan fácil. Que estábamos los dos charlando de la vida, tomando hesperidina felices en el balcón, con la fresca. Y terminamos de tomar el trago, y cenamos, y charlamos con un decoro que dan ganas de salir afuera, a mostrarnos como amigos, con lo bien que sale. Y al final, de postre total, que después de tirarle un palo (que mas que palo era un escarbadientes, super inocente lo mío) y el que me respondiera con un piropo. Y después otro, Y otro mas, y a los besos derecho viejo. Unos besos de lo mas interesantes.
Y que me agarre el pelo, sin problemas, para encontrarse con que a mi me encanta.
Y que encajemos tan tan bien.
Un chico alto.
Muy alto, de larguisimas piernas, cintura estrecha. Un tatuaje, un par de piercings, y un plan.
Y sin ganas de atarse a nada.
Un hombre divertido, avezado en menesteres de cama. Un hombre que pregunta sin juzgar y que juega sin mirar las reglas... y sin cometer infracciones!
me sentí lo suficientemente cómoda como para preguntarme si sera posible, quizás, verlo de nuevo. Sabiendo.
Sabiendo que no es de esos hombres que se atan.
Y jugandomela a cambiar de entrada, a full, con todo. Porque te voy a contar un secreto:
Siempre se pelea con el padre, porque no le deja el auto.
martes, 1 de marzo de 2011
Regalo de Cumple.
Aparte de un alhajero, y pepès tangueros nuevos, tambien me regalaron esto:
Etiquetas:
la buena vida,
la internet,
mis amigos,
tango
despedidas
Tanto despedirme me va a hacer mal.
Mucho champagne invitado.
Mucha pizza invitada.
Mucho tanguero apretujado (ay!)
Mucha cerveza en la semana.
Mucho que hacer.
Poco sueño.
Mucho champagne invitado.
Mucha pizza invitada.
Mucho tanguero apretujado (ay!)
Mucha cerveza en la semana.
Mucho que hacer.
Poco sueño.
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